viernes, 19 de junio de 2009

Estamos en Twitter. Oh, pero que emoción.

No sé si se fijaron, pero nuestra página cuenta con un nuevo inquilino. El pajarraco azul sosteniendo un rotulito es idea de mi colega. Por alguna razón le fascina estar informando al mundo de lo que hace a cada rato.

Hay quienes le encuentran sus beneficios al Twitter, pero yo no. Y aunque me han presionado a entrarle, no cederé. Digo yo, si todos saben lo que hago, ¿de que voy a hablarles a mis amigos cuando me los encuentre?

Imaginemos cómo sería una conversación luego de que yo le entrara al Twitter:

-¡Que onda, muchá! Fijense que ayer andaba en...
-Si hombre, andabas en el centro comercial.

-Si, cabal, pero no se imaginan lo que estaba yo comprando...
-Unas chancletas color melón.

-Sí... pero... no vayan a creer que eran para mí...

-No, sabemos que eran para tu hermana. Fuiste a comprarlas porque calzan el mismo número de calzado, lo que significa que o ella tiene pie de hombre o tu tienes pie de mujer.
-Ehm, creo que ya me voy, adiós.

Poco después de eso ya no tendría razón de salir o para llamar a la gente, y poco a poco me convertiría en un ermitaño, dejándome crecer las uñas y el pelo, bañándome un vez al año y armando modelos de aviones todo el día. Igualito a Howard Hughes, pero desgraciadamente sin los millones de dólares.

Por ello temo por la salud mental de mi colega. Cuando se entusiasma con algún juguete, es capaz de llegar a extremos nefastos, como el que muestra el comic que presentamos a continuación:

2 comentarios:

Purencio dijo...

Oye XD, no creo llegar a esos extremos...jajaja! pero créeme que Twitter es entretenido y útil jejeje ahí que solo usándolo te daras cuenta.

Erick dijo...

wajaja! y eso que ahora puedo actualizar mi facebook desde mi twitter! jajjaja, lo interesante también es que te informas de lo que sucede tanto de las personas que te interesan como de los medios escritos que lo hagan también jejjee me enteré de lo del piloto que murió en pleno vuelo sin levantar un dedo para leer el periódico jajjaja