domingo, 14 de junio de 2009

I don't want my MTV! o: Cómo aprendí a perder el interés y a detestar un canal



No sabría decir exactamente en qué momento me dejó de gustar el MTV. Pero de que ya no me gusta el dichoso canal, ya no me gusta.

Me sorprendí un poco al darme cuenta, porque yo antes era un ardoroso fan. Me gustaba aun antes de haberlo visto con mis propios ojos. Había leído y escuchado excelentes cosas acerca del canal. Un amigo del colegio me contaba de los programas que veía y yo me moría -MORÍA- de la envidia. Cuando entré a la U, finalmente mi empresa de cable empezó a incluir al MTV en su programación, y mi felicidad no conoció límites.

Me parecía el canal perfecto. Todos sus programas me parecían geniales y eran super adictivos:
  • The Real World y Road Rules fueron pioneros del fenómeno de 'reality shows'. Me parecían lecciones sobre como contar historias de cotidianidad que fueran interesantes. Todavía albergo la esperanza de realizar un viaje y hacer un documental.
  • Amp era un programa dedicado a la música electrónica y era una maravillosa vivencia audiovisual, experimental y creativa. Realmente valía la pena desvelarse para verlo a las 12 am de los sábados.
  • MTV Oddities, The Maxx, Beavis & Butthead, Æon Flux, Liquid Television, Ren & Stimpy, Celebrity Deathmatch, Daria. Este canal abrió una ventana a la animación original e innovadora años antes del Locomotion o el Animax.
  • Singled Out fue un programa divertido pero más que nada fue una excusa para ver a Jenny McCarthy cinco veces por semana.
  • Sex in the 90's fue una serie de documentales sobre sexualidad sumamente informativos. Todo lo que sé de menage-a-trois es gracias a este programa.
  • Making the Video fue un buen programa en su inicio, presentando las dinámicas que se dan durante la creación de video.
Con MTV tuve la oportunidad de ver algunos de los mejores videos de todos los tiempos. Imágenes de Jamiroquai bailando con muebles, a los Smashing Pumpkins en una película al estilo Georges Méliès, o a los Folk Implosion rodeados de juguetes de cuerda todavía están vívidamente impresos en mi mente.

Pero luego, MTV decidió que necesitaba más variedad en su programación y menos videos. Lamentablemente, los programas que empezó a introducir fueron de mal en peor: Pimp My Ride, La Casa de los Dibujos, The Hills, Happy Tree Friends. El mal gusto, la estupidez, la obscenidad y la violencia empezaron a predominar de manera aplastante. Y los videos, la razón del ser del canal y le dieron un lugar en la historia de la televisión, fueron relegados a las altas horas de la madrugada. También decidieron que en Latinoamérica únicamente podíamos ver MTV en Español, pálida copia del original.

Todo esto coincidió con el hecho de que ya tenía menos tiempo para ver televisión, lo que me hizo alejarme del canal definitivamente. Cuando intenté retomarlo, años más tarde, me di cuenta que lo que MTV me ofrecía ya no me interesaba para nada.

Así que he buscado otras alternativas: VH1 (hasta que empezó a seguir el camino de MTV), MTV2, TeleHit, Ritmosón, HTV, y más recientemente, Much Music. Hasta he visto Bandamax cuando no hay nada más en la tele. Porque bien sé que si quiero ver música en la televisión, cualquier canal es bueno, excepto el MTV.

2 comentarios:

Care_B dijo...

Totalmente de acuerdo con este sentimiento hacia un canal que ha marcado nuestras vidas en un momento determinado. Lamentablemente, lo que ahora menos pasan es musica y pasan una cantidad increible de programas estupidos y sin sentido...muerte a MTV!

Jr Jimenez dijo...

Es triste cuando pasa eso señoron, pero es una verdad muy cierta.